La madre colaboraba en las tareas domesticas, haciéndose cargo de los hijos y en algunos casos lo complementaba con algún tipo de trabajo, con la idea de favorecer el sueldo del marido.
Los hijos con temprana edad iban a la escuela, y al llegar a los catorce años se disponían a trabajar, así pues uniendo el sueldo de este, el de la madre, y el del padre, se podía conseguir algún ahorro

Los sueldos eran escasos, por lo que había que trabajar muchas horas.
Las personas no especializadas, ganaban prácticamente la mitad del sueldo, que un operario.
Por suerte hoy se ha equilibrado, teniendo todos acceso al mismo tipo de cosas.
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